viernes, 29 de enero de 2016

Poemas prestados #89

Muchas gracias a todos los que nos han enviado sus poemas con las palabras prestadas por el poeta Coriolano González. Te animamos a que sigas participando en la nonagésima edición que empieza el viernes 29 de enero del año 2016.

Premio al mejor poema seleccionado por la editorial Cuadernos del Vigía. Enhorabuena a Keka Conesa quién recibirá el libro Más Realidad de Miguel Ángel Arcas de la editorial Pre-textos




A continuación publicamos los poemas escritos a partir de las palabras prestadas:
isla, marea, medianías, playa y memoria.


❆ ❆ ❆



Entro en ti,
en tu isla mansa de ahogos
con el alma ilesa cuando callo la niebla.

Un estribillo de gaviota recuerda
que soy vela
que soplan nítidos vientos de gloriosa danza
que el légamo de la playa guarda en su vientre de arena
siglos de soledad.

Me anclo en tu latido nómada
y reinas en mi pecho, salobre de tu marea.
Nací para un deseo con sabor a sal horizontal.
Lo olvidé, amor, antes de ti
y me entregué a la orilla inútil que no preña.

La boca quiere boca.
El sexo, tu hondo mar.

Mi último rumbo no surca medianías.
Entro en ti, lo juro, sin memoria.
Atalaya de tu aliento.


Keka Conesa
Sevilla, España


❆ ❆ ❆



Hay sueños que perduran. Cada noche.
Sueños que me despiertan y me abrasan…

Arenas de la playa del Monsul
heridas por el sol. Sombras quemadas.
Piedra varada en el ocaso. Grises
cavernas que las olas bañan.
Ardiente rastro de la luna llena
sobre la mar en calma.
Isla profunda de tu vientre plano.
Memoria.
De las huellas de tus plantas
perdiéndose en las olas moribundas
con tu desnudo erguido en la alborada.
De la penetración en la marea
de la bahía generosa y mansa.
De la acogida con sus brazos húmedos,
dorada duna de tu piel dorada,
revolviendo la brisa los cabellos
y tu ambigua mirada…

Sin rencores, sin hiel; sin medianías
que al corazón turbaran,
¡qué no daría yo por regresarte
antes de que despierte la mañana!


Pedro Bernal
Madrid, España


❆ ❆ ❆



Gritaste isla y vomité arena.
Mi piel es playa rayada de tormentas;
enterrado el cántico de las olas
en las tripas de las ánforas sumergidas
nada se escucha, las dunas están muertas.
La memoria del agua mece las cicatrices
que las ciegas cariátides abrieron con sus mantos
en mi piel arenada, vacía de cangrejos.
Gritaste isla y creí oírte.
Mas tu voz me nombraba sin derribar las piedras
del viejo acantilado cosido a mi esqueleto.
El eco devolvía gritos que eran susurros,
medianías sin aire de lunas apagadas.
En mi piel esperé que fuera tu marea
la que le devolviera los huesos a mi playa,
pero gritaste isla y vomité la arena
que cubría mi vientre de conchas y de algas
pues yo no era la isla sino el puente de olas,
agua de mar rizada vertida desde el templo.
La pleamar que trajo velas rotas de barcos
se llevó envuelta en sal las redes de mi pecho
arrastrando tu voz nacida sin memoria.
Los dioses han rayado en mi piel arenada
dibujos con espinas, fuegos fatuos de nácar
mientras espero el agua que me devuelva el canto
perdido al vomitar la isla de tu grito.
Porque de nada sirve ser playa sin mareas.


Pon
Madrid, España


❆ ❆ ❆



Sin dejar alma que vuelva


En esas noches que adolecen del blancor entre las capas de las nubes
se desata la tormenta en la negrura espeluznante de los sueños.
Y en el medio de las trombas de aguas duras, vientos fieros
descubrí una isla sin océano de luz. Una isla sin memoria,
en esa cartografía arisca de relieves que hasta hieren.
Arrebatos de mareas la alcanzaban, tan licuantes
que lamían todo borde de dulzura junto a sí.
Nunca supe si arrecifes me ocultaba.
Conocí una isla que eras tú.

Vacua y sola,

no te rodeaba nadie.
Bronceabas tus querencias
con la crema que expelía cercanías.
No te compensaba nada. Sin pasiones
desatadas te sumías en la tonta medianía,
tan carente de furor como henchida de apatía.
No te conmovía nunca, mientras yo ya zozobraba
y me caía por la quilla decorada con mi cruel melancolía.
No te recordaba a nadie. Y la fuerza de la lluvia me borraba.
Me hubiera conformado con saber que te sonaban, aunque lívidas
y ralas, mis pisadas que se hundían en cenizas esparcidas por la playa.
Y me hundiste, como hundiera aquel Vesubio su Herculano y su Pompeya
entre lava incandescente sin dejar aire en las huellas, sin dejar alma que vuelva.


Vicente Javier Fernández Gómez
Añastro, Burgos, España

vicentejavier-f.blogspot.com


❆ ❆ ❆



La isla a mediodía

El sol atraviesa el cénit.
Soy bipolar. Pleamar, bajamar:
¿sabes que odio esos puntos intermedios
entre la playa y el acantilado,
entre el rigor rocoso y la blandura?
Prefiero los bajios: incluso la bajeza
-pero nunca las medianías-
o esas grandilocuencias barrocas
que me salpican entero de espumas.
Para estas cosas tengo ya memoria
selectiva y selecta: conozco los límites
de la marea. Y antes de que me hagas
girar una vez más como un timón
o un remolino mareado, esta vez
me quedo –de lejos- solo en mi isla.


Gabriel Merino
Madrid, España


❆ ❆ ❆



Cantando

La isla trae
un sinnúmero
de conchas con el
sonido de las medianías
playas vecinas que
aun cantan
la marea alta y baja
que trae peces
en una manga
que iluminan
en la noche
como luces
que traen la memoria
del mar que enfoca
una barca legendaria
que trae
las riquezas
que se ven
en las constelaciones
con un mar de rutas
para ver el atardecer
que se añora
tatuado en las rocas.


Martha del Pilar
Un Pensamiento


❆ ❆ ❆



Tus letras son mi salvavidas

Vivo sumergida en el sosiego de tus letras,
en cuartillas arrojadas desde los puentes,
bañadas con la hermosa tinta de tus playas,
con la esperanza de que, algún día,
la marea las arrastre hasta esta isla fantasma,
que se resiste a hacerse visible y conquistable.

Me faltan vidas para contar tus palabras,
me sobran muertes por no apreciarlas.

Arrojo botellas vacías al viento sediento de memoria,
me aferro a tus caracteres convertidos en salvavidas,
desde la medianía de esta maldita mirada,
tan dulce y altiva como inconstante y fiel refugio.




❆ ❆ ❆



IN MEMORIAM

Te has ido.
Con la memoria deshecha en ausencias
recorro la playa de mi cuerpo,
playa que ya no acaricia tu marea.
Y lloro.
Mis lágrimas que riegan en silencio
las medianías de la isla que izamos
entre los dos, con lava de volcanes,
se niegan
a apagar el rescoldo que perdura,
ajeno a turbulencias y al trajín
de tantos océanos bravíos y extraños.
Y con paz,
en colores de tarde y de horizonte
me posees. Y mis lágrimas mojan
arena de mi playa, fundida en tus
cenizas.


Celia Naval Naval
Molins de Rei, España


❆ ❆ ❆



Soñando

La marea cubre la playa de la isla mientras escribe sus memorias
en la medianía…


Flor Claramunt
Panamá, República de Panamá


❆ ❆ ❆



Toma de conciencia

Paseando por las medianías
-un atardecer de cara al sur-
escuché una voz que decía:

Tomad conciencia de océano
y negad la orgullosa isla.
Esperad la marea de abrazos
y rechazad la competencia.
Abrid vuestro interior al beso
y sed playa de arenas risa.
Fingid solo de la maldad olvido
y marcad de bien la memoria.

Así, liberados de tanta medianía
podréis mirar de frente a la luna
sin pérdida de vuestro sol interior.


Julio Alcalá
Castellón, España

julitoches.blogspot.com


❆ ❆ ❆



Yo prefiero

Yo prefiero el espacio
de la playa escondida,
la marea que no suba
sigilosa al descuido,
ir nadando en las olas
y esperar suspendida
esa paz que me llena
cuando tú estás conmigo.

Yo prefiero la isla
solitaria, perdida …
las medianías escasas
y quizá sin historia,
descansar simplemente
no sentirme aburrida,
que transcurran los días
sin temor, sin memoria.


Carmen Barrios
Leganés, Madrid, España


❆ ❆ ❆



A veces soy como una isla
rodeada de mar,
de mareas absurdas
que empañan mis labios,
de noches escondidas
llenas de memorias infinitas

de tardes de invernadero,
en playas desnudas de sal
de miradas en tu cuerpo,
de besos lentos sin cicatrices
de no quererte olvidar nunca

de no buscar medianías
y apretar fuerte la vida,
esconder la razón
cerca de donde duele
para no perderte nunca

y que la memoria me sorprenda
con tu mejilla de arena
inundando mi olvido


Maribel Moratilla
Zaragoza, España


❆ ❆ ❆



BÚSQUEDA

Mi memoria es la marea
que va y viene, viene y va
a tu negra playa atlántica
desde mi dorada arena.

No bastan las medianías
de las tierras castellanas
para alcanzar el encuentro
entre mi costa y tu isla.

Coordenadas virtuales
no son prenda ni consuelo
para almas que se buscan,
lejos de sus soledades.


Neus Masergas
Girona, España


❆ ❆ ❆



Nostalgia, "morriña"


Han pasado largos años
y a pesar de la distancia
que separa en nuestra vida
se ha grabado en mi memoria
la experiencia tan querida,
tiempo que fue transcurrido
en la añorada Galicia.

Pequeña playa de Cangas
vacaciones de verano,
privilegio que gozamos
cien adolescentes chicas.
Juventud llena de vida
disfrutadas sanamente,
rodeada de belleza,
natural, exuberante,
la hermosa naturaleza
se brinda, clara, cercana
sin trabas ni medianías.

Con sencillez, con encanto,
recuerdos buenos y gratos,
las monjas nos acompañan
desgranando su rosario
nos vigilan muy de cerca
sus blancas tocas al cielo
semejantes a palomas.
Y nosotras... merendando,
sentadas sobre las piedras,
nuestro pan con chocolate.
entre risas y cantando.

De pronto la marea sube
mojándonos los zapatos,
salimos huyendo a escape
y vemos desaparecer
nuestra "isla de los ratos".

Un paraíso perdido
encontrado en nuestra casa
dejándonos contemplar
desde la hermosa terraza
con vistas al ancho mar,
y sintiendo allá, a lo lejos
alguien empieza a cantar
"La alborada", tan sentida,
que ya no podré olvidar,
porque grabó para siempre
un estilo en nuestra vida.


Hortensia Ayuso
Madrid, España


❆ ❆ ❆



Crecer y multiplicaos

El agua
los helechos en las orillas
el impulso hacia el mar.
El liquido amniótico,
la pulsación de la existencia.
Un embrión nadando
como un rio explorando conciencias.
El agua, el viento
la alerta de las mareas
-azul horizonte indivisible del firmamento-
la identidad perdida
en la medianía del poderoso.
El fin del viaje
salina isla de infinitos.
Una linde espumosa
entre el útero y la luz.
El desgarro
el fruto del vientre
en manos del hombre,
en la medianía del poderoso.
Una memoria cósmica
apuñala la cadencia del junco y la sangre.
Dónde el meandro, dónde el calor
dónde nuestra sed.
¿Qué nos han hecho?


Pilar Gorricho del Castillo
Logroño, La Rioja, España


❆ ❆ ❆



PERDIDOS

Hombres isla, encapsulados
en un mar de soledad,
humanidad que pierde la memoria
del tacto,
vínculos empobrecidos
circulando por fibras de vidrio,
embutidas en laberintos de cable.

La vida en una botella
que la marea arrastrará
hasta la medianía de una playa remota,
una costa deshumanizada
donde la cubra el olvido
como a un Ulises sin retorno.


Carmen Hernández Montalbán
Guadix, Granada, España


❆ ❆ ❆



La vida

Esa marea suave a veces
fuerte y violenta otras
olas de ida y vuelta
tu estas ahí quieta
ansiando el temporal
la marea te transforma
te limpia de medianías
te vuelve atractiva
reaviva tu memoria
te reactiva...
luego viene la calma
y en tu atractiva playa
otra vez creativa
aguerrida
volverán escenas del temporal
del tiempo que fuiste diva
y vivías en una isla,
todo se transforma
hasta la vida.


Cristina Eme
Zaragoza, España


❆ ❆ ❆



Pregunto…

Valdría una sola marea para llevarte?
Por qué tantas razones para amarte tengo
Y a nadie se lo cuentes, dímelo sólo a mí, en silencio, como tú sabes
Por qué este peso, estas ganas, este deseo insatisfecho
En este desvarío de entrelazados y perdones
Por qué tan a desmano de tus manos
Esta canallada del tiempo
Por qué siendo una póstula se asemeja a una puñalada mi herida
Esta impronta machacona, sin celos ni altibajos
Por qué siendo yo una isla creas puente en cada mano
Esas tus manos, convertidas en leyenda, esas tus manos, mis manos
Por qué sin medianías me dices de pronto te amo, y después, tú sabes…
La desintegración en la nada
Por qué verte en cada esquina; y creo verte
Juro que te veo y sin embargo es tinta mojada
Por qué me trajiste a esta playa, yo creyendo en caracolas
Por qué este saber sin memoria
Por qué éste sin engaños
Por qué esta noches tan largas sin ti y sin madrugadas


Marian Orruño
Bilbao, Vizcaya


❆ ❆ ❆


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